Tenía la foto, tenía el soporte, pero al final he cosido menos y scrapeado más...
Os presento el nuevo cartel de la puerta de mi taller-estudio-despacho, la habitación donde paso más horas en casa.
El soporte es un bastidor donde antes colocaba los pendientes que hacía para vender en mercadillos, así que lo guardo con mucho cariño, ¡que me ha acompañado a muchísimos sitios!
La foto es de una máquina de coser que encontré en la calle. Sí. En la calle. Al lado de unos contenedores. La vimos de lejos y un amigo dijo, uy! si parece la funda de la máquina de coser de mi abuela!
Nos reímos, nos fuimos acercando y cuando la levantamos pesaba un quintal. La abrimos al llegar a casa y nos quedamos maravillados. Además, puse el modelo en Google y encontré las instrucciones escaneadas en una página que se llamaba "El costurero de Stella". Claramente el destino la había puesto ahí para mí. Siempre digo que de este mes no pasa que la lleve a arreglar, y ahí sigue la pobre, ¡esperando una oportunidad!
El resto ha ido surgiendo: papel vegetal y adornos que me sobraron del taller de Mireia...Ya está colgado en la puerta del taller, y me gusta tanto que ahora quiero hacer uno para cada habitación...
¡No tengo remedio!
Muy mono!, gracias por participar en kimidori. besotes
ResponderEliminarTeresa